Entonces, en teoría hemos ganado tiempo para nosotros. ¿Lo estamos aprovechando bien? Si a un golpe de clic podemos solventar una duda, hacer una gestión, ¿por qué nos pasamos gran parte del día con el ordenador abierto o con el móvil en la mano?
La conectividad constante a la Red y sus servicios a todas horas y desde cualquier dispositivo y lugar puede generar un nuevo concepto: la "obesidad digital". Ester término ha sido acuñado por algunos expertos, entre ellos el director de relaciones institucionales de Google, Daniel Sieberg.
Vivimos en un mundo donde las relaciones sociales, la educación o la información se han trasladado en buena medida a Internet, pero esto no quiere decir que tengamos que vivir constantemente con las nuevas tecnologías.
La obesidad digital es un problema educacional más que emocional. No nos han dado las pautas para relacionarnos con tanta tecnología. Pero con unas pautas educacionales podemos crear nuestras propios hábitos y límites.
A continuación os desglosaré algunas de las pautas que nos pueden ayudar a mejorar nuestra relación con las TIC:
- En el móvil, eliminar todas las aplicaciones que tengamos descargadas y no sean imprescindibles
- También podemos guardarlo a la hora de las comidas y las cenas familiares
- Marcarnos unas horas para el acceso al correo electrónico
- En redes sociales fijar unos horarios sensatos: no durante las comidas ni antes de ir a dormir. Una buena opción es por las tardes o antes de cenar cuando se tenga un rato libre.
Gracias. Un saludo :)